Hay veces en las que quieres decorar galletas, pero tienes que decorar cientos o hasta miles y la emoción no es la misma con la galleta número 500. Estas galletas son de jengibre, clásicas y deliciosas pero decidí decorarlas antes de hornear, con chochitos y figuritas de azúcar, así las puedo congelar y cuando las necesite en la temporada van a estar y se van a ver muy bonitos. Otro método es decorar con Royal Icing, es un paso más y en general no se congela tan bien.
El otro día hice galletas de monstruos usando Royal Icing…
Pero bueno, por lo pronto regresemos a los muñequitos de jengibre… La masa es muy fácil y extraña pues empieza en la estufa y eso es poco común. Derrite la manteca vegetal (Crisco, si te opones por alguna razón, substituye la mitad por mantequilla, pero no el 100%, cambiaría demasiado la consistencia). Agrega el azúcar y la melaza. Deja enfríar. Agrega dos huevos y bate.
Agrega los ingredientes secos previamente mezclados (aquí va la mezcla de especias que le dan el sabor tan especial).
Llega un punto en el que es muy dificil trabajar en la olla, así que termina la masa en una superficie plana y con las manos.
Amasa hasta tener una masa uniforme, usa más harina si sigue demasiado pegajosa. Envuelve en plástico y refrigera por algunos minutos, horas o toda la noche.
Maneja la masa de poco en poco y en una superficie enharinada con un rodillo estirala al grosor que prefieras, yo tiendo a hacer galletas delgadas…

Acomoda en charolas y a decorar!
Yo uso un palillo para hundir ligeramente los corazoncitos
Hornea por 10-15 minutos (dependiendo del tamaño y el grosor) o hasta que estén doraditos.
Listos, mini muñecos de jengibre, decoraditos desde el horno.
Galletas de jengibre
Esta receta es muy basta, suficiente para hacer una casa de genjibre mediana, árboles y muñecos de sobra.
Puedes congelar la masa que no uses por algunas semanas, envolviendo muy bien en plástico.