Este pastel combina lo mejor de los dos mundos, tiene una parte de panque y una parte de topping crujiente. Es ideal para tomar con café, de desayuno o acompañando un helado.
El éxito, dicen está en el topping. Este hay que hacerlo un poco antes y dejar que seque ligeramente para que tenga la textura de migajas ligeramente húmedas, 5-10 minutos es suficiente. Mezcla el azúcar con canela y mantequilla, al final va el harina y una pizca de sal (de este último paso no tengo foto pero la consistencia es como de masa de galletas).
Mientras tanto, haz la parte de panqué. Acremando mantequilla y azúcar, agrega los huevos, vainilla y al último los ingredientes secos alternando con la crema.
En un molde engrasado acomoda la base de panqué, esparciendo la masa.
Y poco a poco espolvorea el topping, dejando pedazos de todos tamaños.
Hasta que desaparezca de la vista la masa de panqué…
Después de su tiempo en el horno…
Sirve tibio. La combinación de crujiente con suave queda muy bien en cada bocado. Los sabores son suaves y resalta el toque de canela y vainilla. Es un pastel que a todos complace!
Otra vista. Este está acompañando a un Garibaldi, hay que probar un poco de todos!
Pastel Crujiente
Topping:
Pastel: